Este es un extracto de una publicación por Jane Hansen Hoyt, Levanta tus manos
Amo lo que dice Salmos 134 cuando se refiere a Sion. “Bendigan al Señor todos
sus siervos, que de noche permanecen en la casa del Señor.” Quizás eres uno de
los que de noche persevera como intercesor. Hay intercesores de Aglow que
velan por las noches. Podemos decir “en la casa del Señor” porque esa es la
postura de corazón y el enfoque de su oración. “Elevad las manos hacia el
santuario y bendecid al Señor.” ¿Estás cargando un peso de preocupación?
¡Échalo fuera! Eleva tus manos y bendice al Señor en el santuario. ¡Se libre! “Que
desde Sion te bendiga el Señor, que hizo el cielo y la tierra.” A Él es a quien
bendecimos, a Aquel que hizo los cielos y la tierra. Este es Salmos 134 y es una
promesa para ti hoy.
La trata es una maquinación maligna contra la belleza de la creación de Dios que no está limitada por las fronteras geográficas. Es un problema global que puede ser expuesto para que el pecado se detenga y las víctimas sean rescatadas y sanadas mientras nosotros velamos y oramos.
Estamos orando que haya afiliaciones con Aglow en cada nación del mundo. Estamos muy cerca de alcanzar la meta. Sigamos avanzando juntos, para ver a cada nación alcanzada y cada corazón cambiado.
También ora por estas naciones caribeñas en donde Aglow está presente. Ora por mayor influencia del Reino del cielo. Ora que se levanten nuevos líderes. Ora por generaciones más jóvenes que respondan al llamado al liderazgo en Aglow. Dominica, República Dominicana, Gran Caimán, Granada, Guyana, Haití, Jamaica, Puerto Rico.
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Pero los que confían en el Señor renovarán sus fuerzas; levantarán el vuelo como las águilas, correrán y no se fatigarán, caminarán y no se cansarán. (Isaías 40:31). Este es un versículo que nos da gran fuerza y esperanza. También nos da un panorama de nuestro lugar en Dios cuando oramos. La palabra “confían” al inicio del versículo está lleno de significado revelador en el original. Significa, “atar, trenzar, amarrar o enroscar”. Describe el proceso de atar o de trenzar fibras para formar una cuerda más fuerte. ¿Qué tiene esto que ver con la oración? Que cuando oramos, debemos enfocarnos en la bondad, el poder y la provisión de Dios, quien irrumpirá con el milagro que necesitamos. En lugar de vincular nuestro corazón a la necesidad, atamos nuestro corazón a nuestro poderoso Padre lleno de gracia. En lugar de estar entretejidos con la desesperanza y la incredulidad, nos unimos con nuestro Dios que sana, liberta, salva y provee. Por fe, atamos nuestra debilidad a la fuerza de Dios. Para decirlo simplemente, cuando oramos, suelta tus necesidades, aférrate a Dios y Él lo sostendrá. ¿Cuál es el resultado de dicho tipo de oración? Que nuestra fuerza es renovada. Nos levantamos por encima del problema. Disminuye la angustia y caminamos en el poder vencedor de su gracia.
Señor, oro por fuerza para cada intercesor de Aglow en el mundo hoy. Ayuda a cada uno a soltar sus necesidades y a estar inseparablemente entretejido en la fuerza de quien Tú eres. Libértanos de las cosas que parecen mantenernos cautivos y átanos a Tu gracia.
Dios os bendiga.